Split, la segunda ciudad más grande de Croacia, es conocida por sus impresionantes vistas costeras y su rica historia, centrada en el antiguo Palacio de Diocleciano, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Esta vibrante ciudad ofrece una combinación única de arquitectura romana antigua y cultura dálmata moderna, con mercados animados, hermosas playas y un bullicioso paseo marítimo. Split sirve como puerta de entrada al mar Adriático, lo que la convierte en un punto de partida popular para explorar las islas cercanas y disfrutar de diversas actividades acuáticas.